Tan importante en la Antigüedad, el Estrecho de Gibraltar se desvaneció gradualmente en las fuentes árabes después de la conquista islámica a inicios del siglo viii. No fue hasta finales del siglo ix que el estado de los Omeyas de Córdoba se interese por este espacio estratégico. La conquista de Ceuta por el califa ‘Abd al-Rahman III (931) inició progresivamente la construcción de un territorio imperial que se extendía desde los Pirineos hasta el borde del Sáhara. El Estrecho adquirió así un papel central en las redes de circulaciones que conectaban las dos orillas del Mediterráneo occidental, especialmente desde el punto de vista del comercio y de la vida económica. Por eso, puede ser considerado el Estrecho de Gibraltar como un punto nodal no solo a escala continental sino mundial.
Occidente islámico, al-Ándalus, Omeyas de Córdoba, control del territorio, redes de intercambio.